¿Por qué no hay huevos? La gripe aviar y su riesgo para los humanos.
El precio de los huevos ha subido un 60%, por lo tanto pagamos en general de 5 a 7 dólares por docena. Eso si encuentra huevos. ¿Por qué?
Hay un montón de razones, pero en particular, una que no podemos ignorar: la gripe aviar está golpeando con fuerza a las granjas avícolas. Para el público general, esta no es una preocupación inmediata, excepto por la lata de no encontrar huevos en el supermercado. Sin embargo, la gripe aviar está mutando, lo que sí puede tener implicaciones para el futuro. Aquí tienen lo último que sabemos.
¿Qué está pasando?
A principios de enero de 2022, los sistemas de monitorización de enfermedades infecciosas en Estados Unidos detectaron un virus de la gripe aviar altamente patogénico (HPAI, por sus siglas en inglés) llamado A(H5N1), comúnmente conocido como gripe del pollo o gripe aviar.
Dado que más de 54 millones de aves domésticas y silvestres se han infectado a lo largo de 47 estados, se ha producido un brote sin precedentes. Esto incluye 44 millones de gallinas ponedoras, de ahí el precio de los huevos. No habíamos detectado la gripe aviar en Estados Unidos desde 2016, así que este brote es digno de atención.
¿Por qué es importante?
El riesgo de la gripe aviar para la salud humana es, de momento, muy bajo. Como prueba, los CDC han seguido la evolución de más de 5.190 personas expuestas a aves con el virus en 2022, reportándose solo un caso. Si alguien de hecho se infecta, no hay subsiguiente transmisión a otra persona. Es decir, que un humano, en general, solo puede contagiarse de un ave.
Pero, como ha dicho el Dr. Michael Osterholm a STAT, “si estás lidiando con H5N1 nunca bajas la guardia”. Y esto es por tres razones:
Daño económico. A menor escala, los brotes en aves de corral pueden sembrar el caos en gallineros particulares, lo que es estresante para las familias que dependen de su producción de huevos y carne. A mayor escala, los brotes en granjas comerciales destrozan el suministro local de comida, afectan al sustento de granjeros y empleados y suben los precios de la carne de aves de corral dado el suministro limitado. Por ejemplo, una granja de huevos en Iowa mató 5,3 millones de pollos por un solo caso de gripe aviar en la granja lo que constituye el mayor sacrificio de animales comerciales en Estados Unidos.
Alta tasa de mortalidad. Si un humano, de hecho, se infecta, los síntomas pueden variar desde asintomático hasta enfermedad severa, hospitalización y muerte. De 2003-2021 ha habido muy pocos casos en personas en todo el mundo: 884. Pero, 456 de estos casos murieron–un 53% de tasa de mortalidad.
Mutaciones. H5N1 tiene el potencial de mutar para adaptarse a los humanos. Esto puede pasar con mutaciones individuales a lo largo del tiempo o de una vez, con un gran cambio en el cual largas secciones del genoma del virus se recombinan (como en el de la gripe humana) para crear un virus diferente. La preocupación se acrecentó recientemente cuando un informe europeo confirmó la transmisión continua de H5N1 de mamífero a mamífero en España, en octubre de 2022, en una granja de visones. La mortalidad semanal alcanzó el 4.3%. Los científicos obtuvieron el genotipo del virus de la granja de visones y comprobaron que contenía mutaciones raras y no reportadas con anterioridad. Esto podría indicar que el virus está mutando en una dirección preocupante. Muchos epidemiólogos siguen apostando porque la gripe pueda producir la próxima pandemia (tenga en cuenta que la pandemia de gripe de 1918 parece conectada con la gripe aviar). No puedo imaginar un desastre mayor que tener otra pandemia respiratoria pisando los talones a COVID-19, dada la fatiga, la polarización, la falta de confianza y el poco margen de tiempo para prepararnos.
¿Qué podemos hacer?
Las aves infectadas sueltan virus por mucosas, saliva, y heces. Los humanos se pueden poner enfermos respirando las gotitas o los aerosoles que contienen partículas virales.
No puede contagiarse de gripe aviar comiendo huevos o carne de ave. La FDA llevó a cabo una evaluación del riesgo y encontró que el riesgo era muy bajo por tres razones:
El comienzo rápido de los síntomas en las aves = poca probabilidad de que entren en la cadena alimentaria.
Hay dispositivos de seguridad en funcionamiento, como pruebas de diagnóstico en aves e inspecciones federales.
El almacenamiento adecuado y la preparación de la comida en casa es suficiente para inactivar el virus.
Ahora mismo, no necesitan hacer nada, salvo que tengan contacto estrecho con aves. El riesgo de una persona depende de la duración y la intensidad de la exposición. Es decir, una persona con una gallina en el jardín de su casa tiene un riesgo mucho menor que alguien en una granja de aves de corral.
Aquellos en contacto con especies silvestres a su alrededor, en parques, lagos, ríos u otras zonas húmedas necesitan tener cautela, incluso llevar equipos de protección personal, lavarse las manos y cambiarse de ropa. Si tienen aves de corral en su jardín, monitorice la salud de sus aves, especialmente si entran en contacto con otras especies de aves silvestres.
Las instalaciones comerciales han aumentado las medidas de control para monitorizar casos y las medidas de seguridad para proteger a sus aves, y a su personal, lo que también contribuye al aumento del precio de los huevos.
Todas estas medidas van a permitir, a nivel individual, evitar la enfermedad. Igualmente permitirán disminuir el riesgo a nivel de población al reducir el número de veces que el virus muta (y reducir así la posibilidad de un brote en humanos).
¿Cuánto va a durar este brote?
No lo sabemos. Lo mismo que con COVID-19, es difícil predecir el futuro de un virus. La última pandemia de gripe aviar duró 6 meses, así que el brote actual de momento ha durado dos veces más.
En resumidas cuentas
Estamos experimentando un brote récord de gripe aviar. Está siendo devastador para los granjeros y las aves, y tan solo un inconveniente en el supermercado para los consumidores. Los epidemiólogos y virólogos están siguiendo de cerca el brote, especialmente dadas las mutaciones observadas recientemente.
Love, YLE
Mi agradecimiento especial a Lauren Leining—una fantástica candidata a doctorado en epidemiología—que ha ayudado a reunir los datos de investigación para este artículo.
Su Epidemiólogo Local (YLE) está escrito por la Dra. Katelyn Jetelina, MPH, PhD— doctora en epidemiología y bioestadística, esposa y madre de dos niñas pequeñas. De día, trabaja en un comité de expertos en política sanitaria y por las noches escribe este boletín informativo. Su objetivo principal es “traducir” la ciencia de salud pública, en constante evolución, para que las personas estén bien preparadas para tomar decisiones basadas en datos científicos. Este boletín informativo es gratis gracias al apoyo generoso de los miembros de la comunidad YLE. Para contribuir a este esfuerzo, por favor suscríbase aquí.