BA.5 está aquí. Es hora de navegar una nueva ola.
Ha llegado BA.5. Para cuando BA.5 termine, se calcula que un 10-15% de los americanos se habrán infectado. Lamentablemente, las hospitalizaciones y las muertes seguirán a continuación, aunque a niveles más bajos de los que hemos visto con anterioridad.
Hay muchas razones por las que evitar la infección (no puedo perder trabajo; no quiero sentirme mal unos días; los riesgos desconocidos del COVID persistente; vivo con gente vulnerable). Pero incluso si se infecta, todavía puede ayudar a frenar la transmisión.
Aquí tienen cinco maneras para navegar esta ola de forma segura.
Si tiene más de 50 años, póngase la dosis de recuerdo. Ahora.
Si no tiene su primera dosis de refuerzo, ya se la tenía que haber puesto. Si no tiene la segunda dosis de refuerzo, vaya y póngasela ahora. En serio. Consiga una cita aquí. No lo retrase. Podrá ponerse la dosis de refuerzo de Ómicron este otoño incluso si se pone ahora la dosis de refuerzo.
Esto no solo va a prevenir la infección, prevendrá la enfermedad severa. En los Estados Unidos, los adultos de 50 años o más con dos dosis de refuerzo tuvieron 4 veces menos riesgo de morir por COVID-19, comparados con la gente que recibió solo una dosis de refuerzo.
Los menores de 50 años van a ser elegibles para una segunda dosis de refuerzo pronto. Si usted tiene múltiples enfermedades concurrentes, o un trabajo con alta exposición a otros, tiene sentido que se ponga una dosis de refuerzo ahora. Si es joven, está sano y/o ha tenido la infección previamente (inmunidad híbrida), tiene sentido que espere a la dosis de refuerzo con Ómicron en otoño. Yo, personalmente, voy a esperar para mi segunda dosis de refuerzo. Tenga en cuenta que la protección frente a la infección es nula si han pasado unos pocos meses desde su infección y/o última vacunación. Tendrá que usar otras medidas de protección mientras espera a su segunda dosis de refuerzo.
Tome Paxlovid
La siguiente mejor herramienta para las personas de alto riesgo es Paxlovid. Es un antiviral que se toma por via oral y es seguro y muy eficaz frente a la enfermedad severa. Es necesario que Su médico puede darle una receta. La FDA autorizó recientemente la obtención de una receta directamente de un farmaceútico.
No use el mapa de los CDC para saber si ponerse mascarilla
Para saber cuándo llevar mascarilla, no confíe en el mapa de Niveles Comunitarios de los CDC. Este mapa nos indica cuándo iniciar acciones colectivas para que no se desborden los hospitales. Según este mapa (la primera imagen a continuación), el 21% de la gente debería ponerse mascarilla. Esto no nos indica cuándo llevar una mascarilla para nuestra protección individual. El antiguo mapa de transmisión de los CDC, pintado en rojo (y que no tiene en cuenta el reporte por debajo de las cifras reales), muestra que el 98% de los americanos deberían llevar mascarilla en lugares interiores, llenos de gente si no quieren ponerse enfermo. La transmisión es alta en todos los estados y va a seguir subiendo.
Aumente la ventilación
El siguiente video, corto, representa claramente como se extiende COVID19 por el aire. Piense en SARS-CoV-2 como si fuera humo. Se puede extender incluso si usted solo está susurrando y se queda por horas, incluso cuando la persona infectada se ha ido de la habitación. La ventilación y la filtración realmente importan y son herramientas poderosas. Esto es especialmente importante en el Sur, donde hace calor y la gente se queda dentro de las casas. Mueva el aire. Puede usar un monitor de CO2 para saber su nivel de ventilación, si eso ayuda. Se puede contagiar igualmente afuera en un sitio lleno de gente con aire estancado.
Use test de antígenos para romper las cadenas de transmisión
Los test de antígenos en casa son una de las mejores herramientas que tenemos ahora mismo para cortar la transmisión. Son gratis y los puede pedir en la página web de USPS aquí.
Si tiene síntomas, estas son algunas cosas que debe tener en cuenta:
Los test de antígenos son muy buenos en detectar a la gente altamente infecciosa. Puede esperar que capturen del 78% al 97% de los casos en la primera semana de los síntomas.
Los falsos negativos son más frecuentes al comienzo de la infección, especialmente con Ómicron. Si tiene cualquier síntoma, no confíe en un test negativo. Asuma que tiene COVID19 y repase el test a las 24-48 horas. Muy probablemente se haga positivo dada la alta transmisión que hay ahora mismo.
Los test de antígenos son muy buenos para indicar cuándo usted ya no contagia. (tienen muy pocos falsos positivos). Si es posible, deje el aislamiento solo cuándo su test de antígenos sea negativo. Hay evidencia sólida (aquí, aquí) de que la infección por Ómicron dura, de media, 8-10 días. Algunas personas serán contagiosas menos días, y otros más días. Usted no lo sabrá hasta que no se haga un test. Algunas personas no pueden quedarse en aislamiento tanto tiempo (necesitan trabajar o sus empresas no les permitirán seguir en aislamiento después de 5 días dadas las recomendaciones de los CDC). Si este es su caso, lleve una buena mascarilla cuando deje el aislamiento.
Si toma Paxlovid, un 5-10% de las personas tienen síntomas rebote de la infección (lea más aquí sobre los síntomas de rebote). Si tiene un test negativo después de tomar Paxlovid, siga haciéndose un test durante un par de días más. Si da positivo, asuma que sigue siendo contagioso hasta que vuelva a dar negativo.
Si usa test de antígenos antes de visitar a alguien vulnerable, tenga esto en cuenta:
Si tiene el virus y está asíntomático, puede esperar que un test promedio detecte del 44% al 70% de los casos. Esto es bueno pero no perfecto.
Asegúrese de hacerse tests escalonados: uno 48 horas antes del evento y otro de nuevo la mañana del evento. Si los dos son negativos, me sentiría cómoda atendiendo.
En resumidas cuentas:
Hay muchas cosas que podemos hacer para protegernos y proteger a los que están alrededor mientras navegamos la ola de BA.5. Por favor haga uso de estas herramientas. Ayudarán sin ninguna duda.
Love, YLE
Tu Epidemiólogo Local (YLE) está escrito por la Dra. Katelyn Jetelina, MPH, PhD— doctora en epidemiología y bioestadística, profesora universitaria, investigadora, esposa y madre de dos niñas pequeñas. De día, investiga en su laboratorio y enseña cursos de postgrado, y por las noches escribe este boletín informativo. Su objetivo principal es “traducir” la ciencia de salud pública, en constante evolución, para que las personas estén bien preparadas para tomar decisiones basadas en datos científicos. Este boletín informativo es gratis gracias al apoyo generoso de los miembros de la comunidad YLE. Para contribuir a este esfuerzo, por favor suscríbase aquí.